lunes, 31 de mayo de 2010

Luz verde?.. o Luz Roja?

Un hecho lamentable que pasó hace días en Ocotlán fue que quitaran por parte del departamento de tránsito y vialidad, los semáforos que controlaban en tráfico en importantes calles de doble sentido en la ciudad, instaurando un “uno y uno”

Yo me pongo a pensar: ¿Cómo es posible que el ayuntamiento nos pida a los automovilistas, fluidez y cordialidad cuando pone al libre albedrio 4 sentidos de autos en una sola esquina?

¿Cómo se supone que funcional ese “uno y uno” en una situación donde vienen autos de 4 direcciones diferentes?

Ah.. ya se!.. Siguiendo las manecillas del reloj!... primero pasa el de enfrente … luego el de la derecha… luego yo... y después el que estaba a mi izquierda… Si! Claro!!.. Tonto de mi…

Ahora.. No todo es malo!.. no no…

Lo que si aplaudo es que quitaran el semáforo en Hidalgo, llegando a la plaza. Bien hecho.. Eso si agiliza el transito, pues claro!.. Son calles de UN SOLO SENTIDO!!!

Y ahora me pregunto (yo siempre de preguntón verdad?) ¿Dónde fueron a parar esos semáforos que quitaron?, donde los van a poner?

domingo, 16 de mayo de 2010

Ángeles Guardianes

La otra noche, un alumno me visitó en el negocio y nos pusimos a platicar sobre múltiples cosas. Entre cervezas, risas y una plática más que amena, se mencionó el tema de los Ángeles Guardianes.

Aunque no soy muy religioso que digamos, creo en la existencia de Dios, de Su influencia en nosotros y del mundo espiritual.

Mi alumno me comentó que, según él, todos tenemos un ángel guardián, y que este ser protector era ni más ni menos que algún amigo o pariente que en vida quisimos o nos quisieron mucho. El espíritu de un ser querido, nos vigila y protege, mientras está a nuestro lado siempre.

La idea, más que inquietarme, me gustó, y de inmediato mi mente se remontó a la época de cuando yo tenía 7 años de edad. En segundo grado de primaria, yo tenía un amigo, al que yo consideraba el mejor de todos. Luis Ernesto.

Éramos inseparables, jugábamos, reíamos, hacíamos tareas, nos visitábamos, usábamos los juguetes del otro. Nunca nos peleamos por nada. Disfrutábamos la compañía del otro con la inocencia que solo la niñez puede dar.

El destino, Dios, el Universo, las Fuerzas Superiores o como deseen llamarles, tenían otros planes para mi mejor amigo.

Cuando me enteré de su muerte, me encontraba en el pupitre de mi salón de clases, la maestra nos informó a todo el grupo, pero estoy seguro que sólo me miraba a mí mientras hablaba.

Mi corta edad, evitó que me diera cuenta de la terrible realidad. Y me ayudó a aceptar con estoicismo y valentía el hecho que nunca más en mi vida, volvería a ver, platicar y jugar con mi mejor amigo.

Hoy, mis 31 años de edad, todavía lo recuerdo. No puedo evitar pensar en qué hubiera pasado si Luis no hubiera muerto. En el hombre que se hubiera convertido. Un profesionista sin duda. Tal vez la misma carrera que yo. Tal vez otra. Casado seguramente, con hijos (mis ahijados). Seguramente sería un socio más del negocio. Mejor amigo de mis mejores amigos. Alegre, educado, bueno para dar consejos, entusiasta y emprendedor.

Seguramente hubiera estado ahí esa noche, a un lado mío, mientras, con latas de cerveza en las manos, platicamos con mi alumno sobre los Ángeles Guardianes y el hecho de que, Dios los manda precisamente para honrar la estima y amor que nos tienen.

Aunque, soy de la creencia de que Luis Ernesto ya regresó, en forma de mis actuales amigos por los cuales daría mi vida sin pensarlo (no necesito mencionarlas, ya saben exactamente quienes son)… no me desagrada la idea de que mi mejor amigo estuviera esa noche… conmigo en forma de Ángel Guardián, a mi lado, así como lo está ahorita, mientras escribo estas líneas. Sonriendo y diciéndome “No te preocupes, aquí estoy”.

Nos vemos y leemos el próximo Lunes.

lunes, 10 de mayo de 2010

Quien dice mentiras???

En el horizonte se vislumbran relámpagos, la lluvia se aproxima y con ella, la incertidumbre sobre si va a hacer más calor, o el clima será más clemente y nos regalará algo de frescos vientos.



No hablo solamente del clima, sino de la situación actual que se vive en Ocotlán alrededor del Paso a Desnivel de la calle Joaquín Figueroa.



Por un lado, en el Facebook, desde hace días pude ver en el perfil “Acción Juvenil Ocotlán” unas imágenes que muestran las pruebas de que la administración pasada había dejado los recursos necesarios para la terminación de tan importante obra.






Y por el otro lado, me encuentro con una lona del ayuntamiento colgada en dicha obra donde se reza “OBRA INCONCLUSA POR FALTA DE DINERO DEBIDO A UN DESVIO DE FONDOS EN LA ADMINISTRACION PASADA”, aunada a una denuncia penal por parte de la actual administración en contra de sus antecesores.


 

Yo no sé ustedes, apreciables lectores, pero a mí me parece que entre si son peras…. O son manzanas… esa obra va a seguir igual. Y los únicos perjudicados seguimos siendo nosotros, los ciudadanos. Que sin deberla ni temerla, estamos pagando el pato.



No es justo que nos lleven entre las patas entre sus pleitos legales, sus dimes y diretes…



No es justo que con una simple lona o unas imágenes en internet quieran compensar tantas molestias que causa el que esa obra no se concluya, y que se la pasen peleando por encontrar un responsable. Cuando insisto, los que pagamos con molestias y descontentos somos nosotros los ciudadanos.



Somos tres, unos dicen que si, otros dicen que no, y yo el preguntón. Alguien está diciendo mentiras, y NO SOY YO.



Los dejo con esta reflexión y nos vemos y leemos el próximo lunes.

lunes, 3 de mayo de 2010

Yo me pregunto....

Con la apertura de la Oficina Regional de Derechos Humanos en nuestra ciudad se abre un nuevo frente para combatir (o por lo menos denunciar) las injusticias que día a día vemos por todos lados.

¿Podré acaso ir y quejarme que en el IMSS dejan a las personas recién operadas afuera en los pasillos, exponiéndolas a infecciones y mayores problemas, por ser incapaces de dar la mínima atención que nos merecemos como asegurados? ¿Qué los trabajadores (bueno, no todos) de ese instituto son pedantes, altaneros y sobre todo, insensibles ante las dolencias de los pacientes?

¿Podré ir y comentarles que, desde que comenzó esta nueva administración, se ha notado que la inseguridad en las calles de Ocotlán ha ido en aumento?

¿Qué los verdaderos culpables del asesinato del Nako siguen libres, mientras que intentaron darnos atole con el dedo con un chivo expiatorio?

¿Qué el Rio Santiago, lejos de ser un centro turístico, es un foco de infecciones y malos olores que nos avergüenzan ante visitantes de otras entidades?

¿Podré decirles que el departamento de Transparencia es tan opaco que no suelta prenda alguna?, ¿Que hay requisiciones de información que llevan meses procesándose y nada?

¿Que, a cien días de esta nueva administración, Ocotlán parece zona de guerra con tanto bache por todos lados? ¿Qué en vez de darle continuidad a obras públicas, se ponen a culpar a administraciones pasadas por su incompetencia como si eso los excusara de no hacer el trabajo que ahora que les toca?

¿Que nuestros regidores lejos de acercarse a la ciudadanía y ver por nuestros intereses, sean desconocidos para la mayoría de los ocotlenses y que se la pasen mordiéndose entre ellos sin darse cuenta de lo que significa ser un “servidor público”?

¿Podré ir a quejarme cuando me amenacen y me digan que “le baje de huevos” sólo por escribir lo que pienso, como un ejercicio de periodismo y haciendo uso de mis garantías individuales y mí legitimo derecho de libre expresión?

Nos vemos y leemos el próximo lunes…

Reflexiones Cinéfilas

Al entrar a una sala de cine, se tienen muchas expectativas sobre lo que uno experimentará en la siguiente hora y media. A veces uno sale ...